Del 27 septiembre 2024 al 07 noviembre 2024
De lunes a viernes de 9 a 21h. Sábados de 10 a 14h.
Exposición
Centro Párraga
ARTE CONTEMPORÁNEO
Espacio 2
Inauguración: viernes 27 de septiembre, 20:30h.
Proyecto comisariado por Javier Sánchez Martínez
En nuestro trato diario con el mundo la mayoría de las cosas se ocultan de nosotros, ya sea retirándose en su acostumbrada función o desapareciendo en su transparente cotidianidad, y sin embargo, las cosas no solo están ahí de manera inexorable, envolviéndonos como una suerte de compacto caparazón, sino que, lejos de plegarse de manera pasiva a nuestros deseos, actúan y nos afectan, se modifican y nos modifican, en una suerte de acción recíproca que, en cierto momentos, nos hace incluso indistinguibles: ¿cómo distinguir, por ejemplo, el lápiz de la mano que dibuja? O dicho de otro modo, ¿quién dibuja cuando se dibuja?
Los cuatro últimos años de la obra de Ana Martínez ha estado dedicados a esta dimensión activa pero invisible de las cosas. Odradek, o cuando las cosas tenían puntas es un proyecto que arroja nueva luz acerca de esta potencia latente que habita en los objetos que nos rodean. Ana trabaja con un conjunto de cosas que de un modo u otro siempre se encuentran ligadas a su biografía, ya sean heredadas, encontradas o regaladas, y sobre las que vuelve una y otra vez, dibujándolas por separado o en conjunto, ensamblándolas unas con otras, documentándolas fotográficamente o trazando detalladamente sus perfiles, como si cada vez que intentara aprehenderlas reparara en algo súbito e inesperado, como si fuera imposible agotar su potencia. Las cosas cobran forma de cristales de tiempo, es decir de fragmentos condensados de historias, memorias y vidas singulares y compartidas. Las cosas definen quiénes somos como individuos y como sociedades, condensan identidades y memorias, pero también nos proyectan hacia tiempos por venir. De ahí que, frente una cierta tendencia de época que desestima el valor vinculante de las cosas, Ana celebre de manera literal su presencia mediante una serie de efímeros festejos que, a la manera de sencillos rituales de bengalas y confetis, conmemoran y alaban su secreta capacidad para sostener nuestras vidas. Y sin embargo, nuestra relación con los objetos no está exenta de riesgos, ya que siempre cabe la posibilidad de perderse en ellas, por eso, en uno de sus escritos tardíos, Walter Benjamin aconsejara «sujetar con gran cuidado las agudas puntas de las cosas para no desangrarse».