Molina de Segura, 1980.
Mis trabajos no buscan una narrativa explícita, sino la construcción de un lenguaje figurativo propio donde intento que la obra tenga importancia como obra individual más allá de los aspectos narrativos que pueda tener. Busco relaciones que vayan entre la evidencia y la interpretación, entre la figuración y abstracción, entre el blanco y negro y el color. Utilizando diferentes materiales en una misma obra, como acrílico, óleo, spray o esmalte. Que el dinamismo pictórico sirva y exceda el tema representado es un concepto fundamental en el desarrollo de mis obras.
Trabajo a partir de imágenes encontradas en internet que me sirven como punto de partida, las cuales acaban siendo alteradas mediante su fragmentación y reconstrucción posterior, generando una imagen diferente a la original. La enfermedad, el dolor, la violencia, son algunos de los temas que aparecen de forma recurrente. Me interesa la creación de imágenes que exploren la fascinación y el abismo entre belleza y horror, y que provoquen en el espectador cierta sensación de incomodidad e inquietud.
Mi idea de obra de arte es aquella que va más allá de la imagen. Es aquella que invita al espectador a cuestionar la relación entre el contenido y el tema de la obra.